Dani Mérida nunca olvidará su primera fase previa de Grand Slam. El madrileño sumó dos victorias de primer nivel en Nueva York antes de caer este viernes ante el experimentado Lloyd Harris, exnúmero 31 del mundo, que le venció en la última ronda de la qualy por un tanteo de 6-1 y 7-6(2).
Si los encuentros ante Dalibor Svrcina y Titouan Droguet en las rondas precedentes habían sido duros, el último escollo antes de alcanzar el cuadro final era aún más exigente. Enfrente se encontraba Lloyd Harris, un espigado tenista sudafricano, de los mejores sacadores del circuito y que, sin lesiones, era un sólido top100 del ranking ATP.
Desde el primer momento, Harris se encontró mucho mejor en pista. Su poderoso saque -a pesar de firmar un pobre 44% de primeros servicios- era difícil de leer para un Mérida que enseguida estuvo a merced del sudafricano en los intercambios. El primer set fue visto y no visto: 6-1, dos roturas de saque en la cuenta de Harris en apenas 25 minutos de juego.
En el segundo set, el joven madrileño pudo entrar un poco más en ritmo y fue robándole poco a poco puntos jugados con el segundo saque a su rival. Aún así, entregó su saque con 4-4 en el marcador y parecía abocado a la derrota por la vía rápida, pero pudo romper por única vez en el encuentro el servicio a Harris, mantener luego el suyo propio y forzar al menos el tie-break. En esa instancia, Mérida fue inferior y entregó el desempate por 7-2 y por consiguiente el partido.
A pesar de la derrota, Mérida puede irse muy contento de Nueva York. Su primera aventura en la Gran Manzana ha sido muy positiva y ha demostrado que tiene tenis para poder estar entre los cien mejores en un medio-corto plazo.
*Foto US Open