La Real Federación Española de Tenis (RFET) ha presentado este sábado su Proyecto Deportivo 2017-2020 en el marco del Mutua Madrid Open. El Presidente de la RFET, Miguel Díaz, ha estado acompañado por el Director Deportivo, Javier Soler, junto a Toni Nadal y Xavier Budó, componentes del Comité Técnico de Entrenadores.

En la presentación han intervenido también el Director del Área de Docencia e Investigación de la RFET, David Sanz, y el responsable de los Servicios Médicos, el doctor Ángel Ruiz-Cotorro.

Un equipo multidisciplinar compuesto por técnicos, médicos y directivos ha puesto los pilares para que la marca de Tenis España siga siendo referente mundial.

Este nuevo proyecto se basa en:

• Promocionar y ayudar al jugador en su lugar de entrenamiento y residencia. Se han destinado más de 200.000 euros a estas ayudas.

• Subvencionar el primer escalafón del tenis profesional (ITF´S y Challenger) para que los jóvenes puedan competir sin salir de España. En este sentido la RFET ha pasado de cero a 240.000 euros en ayudas a los torneos.

• Unificar los sistemas de formación (para entrenadores y jugadores) a nivel nacional con unas recomendaciones técnicas que permitan guiar el proceso en todas las etapas para conseguir el desarrollo del jugador a largo plazo. En este proyecto han colaborado Toni Nadal, Xavi Budó y David Sanz, entre otros.

Estas orientaciones técnicas de formación buscan la excelencia y la salud del jugador. Los nuevos materiales y las exigencias del tenis del siglo XXI están provocando en jugadores jóvenes más lesiones de lo normal. Por eso es fundamental el control de las cargas de entrenamiento y competición con un programa de prevención de lesiones. En este apartado, el médico de la RFET, Ángel Ruiz Cotorro, ha desvelado este problema tras un estudio realizado a más de 1500 jugadores de todas las categorías.

En esta línea Javier Soler, Director Deportivo de la RFET, ha apuntado que es vital el uso de material adecuado en las primeras etapas de formación del jugador. Por ejemplo, el uso de bola verde en categoría sub-10, así como limitar el número máximo de competiciones que puntúen en el calendario nacional.